
El Museo Casa de la Independencia – Casa del Florero es una entidad del Ministerio de Cultura de Colombia y un miembro de la red FIHRM-LA (Federación Internacional de Museos de Derechos Humanos Latinoamérica). Se encuentra ubicado en Bogotá y fue conocido previamente como “Museo del 20 de Julio”.
La institución está ubicada en una construcción colonial de gran valor patrimonial en el centro de Bogotá. Según su propia página oficial, la casa fue construida a finales del siglo XVI y terminada a comienzos del siglo XVII, y conserva el estilo árabe-andaluz (mudéjar) típico de algunas edificaciones coloniales: muros blancos, puertas y ventanas con madera verde, balaustradas, balcones característicos.
El porqué detrás del museo del 20 de Julio
El espacio se ubica en una construcción colonial en la esquina noreste de la Plaza de Bolívar. En él se produjo el famoso episodio histórico conocido como el “Grito de Independencia”.
El 20 de Julio de 1810, un conocido representante de la ciudad encabezó, junto con un grupo de ciudadanos, lo que por aquel entonces era conocido como Santa Fe —actual Bogotá—, y se acercaron a la casa de un ciudadano español. Ese establecimiento, donde hoy funciona el museo, fue el centro de una escena que desencadenó una serie de eventos históricos.
Los criollos solicitaron el préstamo de un florero para el agasajo de miembros de la Real Armada. El pedido era una excusa y parte de un plan para incitar al residente, González Llorente. Cuando este se negó a prestar el florero, se generó una situación de tensión que terminó por convulsionar a la población que se encontraba en la plaza mayor. El episodio pasó a la historia como la chispa que despertó los ideales independentistas que se rebelaron contra el gobierno español.
Museo parte del proceso independentista colombiano
En 1960, con motivo del sesquicentenario de los hechos de 1810, la casa fue declarada Monumento Nacional y convertida en museo con la intención de conservar la memoria histórica del movimiento independentista.
Desde esa fecha, el Museo de la Independencia – Casa del Florero ha reunido una colección de más de dos mil trescientas sesenta piezas que abarcan desde la época colonial hasta tiempos contemporáneos, con pinturas, grabados, fotografías, documentos, monedas, muebles, indumentaria y armas, entre otros objetos.
El espacio busca, a través de esta colección histórica, abrir lugar a la función educativa y reflexiva. Impulsa desde sus talleres y exhibiciones los conceptos de autonomía, libertad, ciudadanía y sociedad.
Física y simbólicamente, el museo ocupa un lugar en el centro de Bogotá, está emplazado en un punto neurálgico de la vida política y cívica del país: la Plaza de Bolívar. La plaza es el gran zócalo central de la ciudad, donde residen los edificios históricos más importantes. Si bien fue creada en el siglo XVI, se remodeló en los años 60 para conmemorar el 150.º aniversario de la independencia de Colombia.
Toma su nombre de Simón Bolívar —su estatua destaca en el centro de la plaza—, el líder militar venezolano que desempeñó un papel fundamental en la liberación de América Latina de la dominación española. En la actualidad, es el punto de encuentro para las movilizaciones sociales y protestas por parte de la ciudadanía.
Expansión y construcción colectiva
El museo construye con sus usuarios y comunidades, de manera participativa, una experiencia significativa sobre los conceptos de independencia y ciudadanía.
A partir de 2010 —en el marco de la conmemoración del Bicentenario de la Independencia de Colombia—, el museo inauguró seis nuevas salas. En cada una hay herramientas interactivas que se alejan de la idea de museo estático para proponer a los visitantes una comunicación directa con los sucesos que desataron la revuelta del 20 de Julio de 1810 y también con hechos actuales que han marcado la historia del país, tales como la Toma del Palacio de Justicia.
Desde el museo destacan que en el recinto trabaja “un equipo conformado por profesionales de variadas disciplinas entre las que se cuentan la pedagogía, la antropología, la museología y otras disciplinas diversas”. Es por eso que remarcan que “quienes hacen posible que los visitantes tengan experiencias significativas relacionadas con la búsqueda del bienestar y la confianza entre los ciudadanos”.
Colombia, la historia y la red Fihrm
El Museo de la Independencia, miembro de la red Fihrm Latinoamérica, propone un espacio que conserva, investiga, comunica y divulga el patrimonio cultural e histórico de la nación, a través del diálogo sobre el ejercicio de los derechos culturales y la memoria.
Desde la red se busca potenciar y respaldar activamente a los museos como espacios donde la historia se preserva para ser compartida. De esta forma, se ofrece la posibilidad de reflexionar sobre los sucesos que marcaron la historia de un país y de una región, que unen los relatos de los países latinoamericanos. Parte de la apuesta de Fihrm es respaldar y visibilizar este necesario trabajo.