
El Museo AMA y No Olvida: memoria y justicia
Ausencias transformadas en acción. Búsqueda incansable de justicia. Eso es Ama y No Olvida, miembro de la red global Fihrm-La. En 2019, los familiares de las víctimas de la represión de abril de 2018 en Nicaragua se unieron para crear un espacio común: un lugar de preservación, conmemoración y homenaje.
El proyecto se centra en contrarrestar la narrativa oficial que criminaliza a los manifestantes y en preservar testimonios, fotografías y documentos que relatan lo ocurrido. Organizaciones internacionales de derechos humanos denunciaron que el Estado nicaragüense, bajo el mando de Daniel Ortega y Rosario Murillo, fue responsable directo de más de 300 muertes y de múltiples violaciones a los derechos humanos, incluidas detenciones arbitrarias y torturas. Así nació Ama y No Olvida, para dignificar a las víctimas.
Grupos especializados de la ONU concluyeron que el Ejército de Nicaragua participó activamente en la represión, colaborando con la Policía Nacional y con grupos armados progubernamentales. Además, se documentaron casos de tortura, detenciones arbitrarias y juicios fraudulentos contra manifestantes y opositores.
El museo disputa la versión oficial que criminaliza a quienes participaron en las protestas cívicas y desafía el clima de impunidad propiciado por el gobierno local. Su archivo contiene semblanzas de las víctimas de la violencia estatal, información y relatos de los hechos, fotografías, materiales audiovisuales y distintos documentos que permiten dimensionar el contexto de las protestas sociales.
Orígenes del museo
Ante la falta de respuestas y justicia por parte de las instituciones, las madres se organizaron para crear un espacio donde las historias de sus hijos fueran escuchadas y pudieran resonar tanto dentro del país como a nivel internacional.
El museo, miembro de Fihrm Latinoamérica, ha realizado numerosas acciones, especialmente conmemorando la represión de abril de 2018, y exponiendo las piezas que lo componen. Cada exposición es disruptiva y cuestiona la versión oficial, así como la estigmatización de los manifestantes.
Exposiciones y testimonios
Durante el recorrido por el museo, los visitantes encuentran retratos de las víctimas, objetos personales, cuadernos, cartas inconclusas y pancartas de protesta. Grabaciones de familiares permiten escuchar relatos sobre el pasado reciente, en un ejercicio de memoria donde cada historia se convierte en testimonio y acto de resistencia.
Frente al Estado policial de facto en Nicaragua, que limita la protesta y la denuncia, AMA y No Olvida ha llevado sus exposiciones a nivel internacional. La iniciativa mantiene viva la exigencia de justicia frente a los crímenes de lesa humanidad cometidos por el Estado y moviliza a la diáspora y a la comunidad internacional en acciones de memoria y reivindicación de derechos. Sus exposiciones itinerantes invitan a reflexionar sobre la importancia de preservar la memoria, promover la justicia y sostener el reclamo de reparación.
La relevancia de las Madres de Abril
La Asociación Madres de Abril (AMA) transformó la pérdida en lucha organizada. La organización exige justicia por sus hijos, promueve una cultura de paz y democracia y da a conocer internacionalmente la situación de derechos humanos en Nicaragua a través de exposiciones que visibilizan los hechos.
Durante los primeros asesinatos, familiares y amigos de las víctimas —madres, padres y allegados— se unieron para exigir verdad, buscar justicia y construir una memoria colectiva de resistencia civil. De este esfuerzo nació AMA, una organización privada, sin fines de lucro, autónoma, independiente, apolítica y alejada de intereses gubernamentales o económicos.
AMA representa la respuesta no violenta de miles de familias afectadas directa o indirectamente por la represión estatal desde abril de 2018. Ante la ausencia de acceso a la justicia, estas familias crearon un espacio para reivindicar los derechos humanos, honrar a las víctimas y mantener viva la memoria de los hechos.
La organización también se solidariza con quienes continúan sufriendo la represión, ya sea en cárceles, en el exilio, bajo intimidación o mediante las múltiples formas de violencia que el régimen mantiene hasta hoy.
Represión y protesta en Nicaragua
Después de abril de 2018, manifestarse se volvió un riesgo. Las calles se encuentran estrictamente vigiladas y las marchas pueden terminar en arrestos o violencia.
Mientras tanto, los responsables de la represión no han sido investigados. La justicia nicaragüense no ha abierto procesos independientes.
En este contexto, el museo funciona como un archivo alternativo. Documenta lo ocurrido y ofrece evidencia de lo que el Estado niega. Cada sala funciona como un registro abierto que mantiene vigente la realidad social.
El significado del museo para el país
El museo AMA y No Olvida representa un refugio, un espacio colectivo que moviliza la esperanza y el anhelo de justicia. Su trabajo muestra que la memoria puede traspasar fronteras y llegar a quienes quieran escucharla.
Fihrm – La acompaña en su lucha y difunde globalmente su mensaje, recordando que nadie debe ser olvidado.